La foto la hice después de caminar por Barcelona medieval, en la Barceloneta. Estaba agotadísima. Tenía mucho tiempo viajando con la mochila en la espalda y durmiendo en camas poco cómodas… seamos honestos, nadie duerme bien en un hostal.
Pero no la tomé pensando en blanco y negro. Su verdadera esencia está a color. Y cuando la vi en mi computadora no dudé en convertirla en lo que es hoy. Porque es la historia del chico que corre y sé que tiene algo por decir.
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Ficha Técnica de la foto en el microcuento:
Canon, PowerShot SX530 HS.
Barcelona, España. 2017.
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